NEW BRUNSWICK, NJ–La Escuela Culinaria Promesa situada en la Avenida Livingston organizó una Casa Abierta el 29 de octubre donde exhibió sus programas de educación culinaria.

La escuela Promesa abrió sus puertas hace 13 años como una división de Elija’s Promise, una organización de servicio social que empezó como un comedor comunitario.

La escuela ofrece programas de certificación en Artes Culinarias y Artes de Panadería y Repostería, y proporciona tanto la certificación del estado, así como ayuda para conseguir empleo.

En la Casa Abierta los asistentes conocieron a Pearl Johnson, Directora de la escuela Promesa y recibieron información sobre los dos programas que incluyen la duración, el costo, los requisitos y el plan de estudios completo. Además realizaron un recorrido por la cocina y los salones de clase.

Los requisitos para entrar a la escuela Promesa están enlistados en el sitio web, y son: tener mínimo 18 años de edad y un nivel de lectura de sexto grado, además de estar libres del alcohol y drogas.

El programa de Panadería y Repostería tiene duración de 24 semanas, de lunes a viernes, y ofrece a los estudiantes una visión a profundidad en el campo de Panadería para mejorar su comunicación culinaria a través de la planificación del menú, clases de matemáticas, y talleres.

También hay clases de cocina durante el día y la noche, con programas de 19 semanas en el día y de 22 semanas  en la noche.

Los programas culinarios ofrecen una mirada a la industria de la alimentación con la formación en habilidades con el cuchillo, elaboración de la carne, pannadería básica, normas “ServSafe”, catering, cantidad de alimentos, manejo adecuado de los alimentos, planificación de eventos y más.

Nos estamos centrando en la comida a la mesa, sostenible. Todo el mundo quiere algo que ha sido sembrado y cultivado localmente. Ellos quieren ser capaces de llegar a la persona que produjo su comida, dijo Pearl Thompson.

“Eso es lo que enseñamos a nuestros estudiantes, que tienen que saber de dónde viene su comida. ¿Cómo llegó a la mesa y que ética estaba involucrada.”

Junto con la formación práctica en la cocina, los estudiantes aprenden en las aulas y también rinden exámenes.

Martha Cambridge, una tutora en la escuela Promesa, dijo: “La escuela es un programa de dos partes. Uno está en la cocina y otro funciona fuera de un libro de texto. Hay un plan de estudios asociados a ella y yo ayudo con las técnicas de estudio y la preparación para la vida.”

La escuela Culinaria Promesa se asocia con el Departamento del Trabajo de NJ y otras organizaciones para ayudar a reducir los costos de matrículacion.

Becas y planes de pago personales se ofrecen para dar cabida a cada estudiante.

Parte de la ayuda de matrículacion incluye la ayuda del Departamento de Desarrollo Laboral y la División de Rehabilitación Vocacional, para personas con discapacidad de aprendizaje documentada, discapacidad o lesión, o recuperacion de abuso de alcohol/drogas.

La escuela ofrece asistencia personalizada para conseguir empleo y ayuda a cada graduado a encontrar el mejor lugar de trabajo. Entre las opciones disponibles se incluyen restaurantes cinco estrellas, hoteles, panaderías, servicios de comidas, cafeterías corporativas, hogares de ancianos, hospitales y otros establecimientos de hospitalidad.

“Nuestro objetivo es conseguir que los estudiantes trabajen en el campo. No importa dónde estés en la vida, siempre hay un lugar para ti en el campo,” dijo Chef Thompson.